El salto de longitud o salto largo es una prueba actual del atletismo que consiste en recorrer la máxima distancia posible en el plano horizontal a partir de un salto tras una carrera.
Forma parte del programa de atletismo en los Juegos Olímpicos en la categoría masculina y femenina desde su primera edición celebrada en Atenas 1896. La categoría femenina de la prueba debutó en los Juegos celebrados en Londres 1948. No obstante, esta prueba ya se realizaba en los Juegos Olímpicos en la Antigüedad,al menos desde el año 708a.C. incluida dentro de la prueba del pentatlón.
TÉCNICA:
Fase de carrera
La carrera tendrá una longitud de 16 a 20 m o 50 m en el caso de los profesionales.
Fase de impulso o de batida
Se trata de lograr el mayor impulso vertical sin pérdida de
velocidad. Para ello el saltador realiza un penúltimo paso un poco más
largo y un último paso un poco más corto. De esta manera es más sencillo
realizar el impulso vertical del centro de gravedad, sin una pérdida de
velocidad considerable.
Fase de suspensión o vuelo
Existen tres técnicas en los movimientos que ejecuta el atleta
durante esta fase. Dichos movimientos van encaminados a adoptar una
posición final más equilibrada y rentable:
- Técnica natural: para saltos de poca longitud y
principiantes. Es muy simple: durante la suspensión la pierna de batida
se une a la libre y en esa posición de "sentado" se efectúa la
traslación. No se suelen conseguir buenos saltos con esta técnica.
- Técnica extensión: consiste en estirar las piernas y
flexionar la espalda hacia delante. Se mantiene esta posición evitando
que bajen las piernas en la caída. Esta técnica es bastante aceptable:
si se hace bien, se gana aproximadamente medio metro respecto a la
anterior.
.Técnica de paso o tijeras: el saltador se cierra de forma
continua, como si estuviese corriendo en el aire. En función del número
de pasos que realice podrá denominarse "salto de 2 y medio", "3 y medio"
o "retra y medio".